martes, 22 de junio de 2010

ESTA DE DUELO POR ADELGAZAR?

Adelgazar tiene vericuetos asombrosos. Los seres humanos, a lo largo de nuestra vida, tendemos a alcanzar ciertos equilibrios para poder sobrevivir; eliminamos e incorporamos sustancias, sentimientos, roles hasta llegar al balance. A veces tomamos comida, afecto, conocimientos… Descargamos desechos, emociones, trabajo, palabras… Intuitivamente, nos ubicamos en el lugar "menos malo" que podemos...




Las personas gordas, aunque están enfermas, también han logrado cierto equilibrio. Y al comenzar a adelgazar, este equilibrio se ve amenazado. Al principio, el impulso o la euforia de ver los resultados suele cubrir la sensación de pérdida, pero con los kilos que se van, se va también un poco la motivación.



El corazón empieza a trabajar más descansado, los pulmones respiran con alivio, las rodillas crujen menos, la ropa comienza a quedar holgada, y los demás elogian la proeza de haber bajado los primeros kilos.



Entonces, la fuerza revolucionaria del principio suele decaer. Y comienza un proceso de duelo. Por el cuerpo que va cambiando, por la renuncia que se ha hecho a la forma de comer conocida, por tener que resignar ciertos roles conocidos (como el de la madre que agasaja a todos con mucha comida, por ejemplo).



Se tiene una sensación de pérdida. Si la motivación para bajar sigue siendo alta y el apoyo profesional o de grupo es bueno, el duelo será menor. Y en los casos de personas bien adaptadas psicológicamente, puede llegar a no aparecer.



Pero, en otros casos, especialmente cuando se usan métodos antinaturales o antifisiológicos como dietas muy restrictivas, es probable que aparezca el llamado cuadro de abstinencia. Usted seguramente sabe que los alcohólicos que dejan la bebida, o quien deja el cigarrillo o cualquier otra sustancia tóxica, al cabo de unos días padecen una reacción especial: una protesta del organismo ante la falta de lo que consume regularmente. En la persona gorda se puede producir lo mismo, según el grado de dependencia o adicción que tenga con la comida.



Por otra parte, al bajar de peso, algunas cosas a su alrededor también cambian. La actitud de la gente puede ser distinta de lo que usted espera. Tal vez note envidias, boicot, falta de apoyo, o simplemente que en algún momento a nadie más le llame la atención que usted esté flaco... Y esto puede producir frustración. Entonces aparece irritabilidad, falta de deseos de seguir el tratamiento, cierta tristeza, melancolía, miedos…



Conviene conocer que esto puede suceder y estar alerta para no asustarse: es posible convivir exitosamente con esa nueva persona que se refleja en el espejo. Esto dependerá del proceso de adelgazamiento que está transitando:





Buen adelgazamiento implica que usted

Mal adelgazamiento significa que usted



Hace un plan integral que incluye programa de alimentación, actividad física y educación obesológica.

Sólo hace dieta. Se basa en ayunos o dietas muy restrictivas. O tiene toda la energía puesta en el gimnasio.



No usa "preparados adelgazantes”. En todo caso, la medicación hoy aceptada internacionalmente.

Toma los preparados que le recetó el pseudohomeópata o se automedica.



Tiene expectativas adecuadas para el descenso de peso.

Tiene expectativas irreales. Quiere bajar más de lo posible.



Baja progresivamente, poco a poco.

Quiere batir un récord.



Tiene buena motivación.

Tiene una motivación pobre.



Ve más desventajas que beneficios en seguir siendo gordo.

No encontró cuáles son los beneficios de adelgazar.



Hace cambios de vida que lo ayudan a mantener su nuevo peso.

Sigue haciendo la misma vida.


A veces, el miedo al cambio es muy fuerte. Es como si la persona se dijera: “Estoy casado, tengo mi hogar, mi trabajo, limpio mi auto los sábados a la tarde, voy a casa de mis suegros los domingos al mediodía, y considero que cualquier cosa fuera de esto es una locura. No quiero fantasear con nadie, ni resultar tentador/a para nadie, mi pareja me prefiere gordito/a porque así no se siente celoso/a…”



Pero es preciso saber que cuanto más correctamente se elabore el duelo del adelgazamiento, menor será el problema para continuar. Y finalmente los resultados serán positivos en muchos aspectos. Es cuestión de aceptar el desafío.



¡Exitos!



Dr. Alberto Cormillot

lunes, 24 de mayo de 2010

Persevere con valentia y triunfara

"Un día de éstos voy a empezar a caminar"... ¡Cuántas veces lo hemos escuchado e incluso lo hemos repetido! Es increíble la infinidad de excusas que podemos encontrar para justificar la falta de acción. "Un día de éstos" significa, en realidad, ningún día.



La postergación es el arte de mantenerse siempre “a punto de" hacer algo, sin alcanzar la satisfacción de lograrlo. Esta conducta se vale del autoengaño, la ilusión de iniciar mañana algo que hoy no hacemos: es el clásico “el lunes empiezo”… También utiliza el escapismo, la falta de compromiso serio para llevar a cabo lo que se eligió; en este caso cualquier excusa parece válida: “es que estoy angustiado...”, o “con el día que tuve hoy ¡qué querés!”.



Algunas personas postergan realmente convencidas de que en algún momento van a comenzar: la postergación es su forma de vida. No llegan nunca a la acción, tal vez por el temor que les genera el fracaso (“¡otra dieta más, yo nunca bajo un gramo!”) o el éxito (“¿y si adelgazo y le gusto a alguien...?).



También están quienes juegan con el límite. Dejan todo para último momento y luego justifican los malos resultados por “falta de tiempo”. Se "ponen a dieta” una semana antes del casamiento, ayunan, se la pasan a sopa y pretenden que su organismo adelgace en siete días lo que llevaría varias semanas o meses.



Otros evitan enfrentar las situaciones que les resultan complicadas: dejan pasar el tiempo indefinidamente y se van acostumbrando a estar gordos (y aprovechan los beneficios ocultos que tiene la obesidad).



Las consecuencias de la postergación dependerán de qué es lo que deja de hacer. En relación con su salud –hacerse un chequeo médico, comenzar a hacer ejercicio o cuidar su alimentación- estará disminuyendo nada menos que su calidad de vida. Tenga presente que nadie puede obligarlo a cambiar, pero tampoco nadie puede impedirle que lo haga.





Identikit del postergador

• Espera que las situaciones se resuelvan solas.

• Cree que no está preparado para actuar y tiene miedo al fracaso, aunque difícilmente lo reconozca.

• Evita la confrontación con los demás.

• Se justifica con excusas: “no tengo tiempo”, “hace calor”, “estoy cansado”.

• Vive en función de otro (hijo, esposo/a, madre, padre).



Posterga para

• Evitar situaciones difíciles o desagradables.



• No arriesgarse, porque íntimamente se siente cómodo.

• No cometer errores. Cree que va a actuar cuando se den las condiciones que considera perfectas.

• Culpar a otros de su infelicidad.

• Evitar el posible fracaso.









Si se reconoce en este identikit más de lo que le gustaría, no desespere. Empiece por cosas tan simples como mirar a su alrededor. Haga el siguiente experimento: tire esas recetas que recortó del diario y sabe que nunca va a preparar, cambie la disposición de los muebles, arregle las cosas que últimamente se rompieron –el cuerito de la canilla, la tira de la mochila-, deshágase de la ropa que le queda chica o grande, o simplemente de la que no usa y guarda “por las dudas”…



Revise los objetos escondidos en los cajones del baño, la cocina, el dormitorio. Seguramente encontrará al menos tres cosas que ni siquiera recordaba que tenía porque hace meses o años que no necesita. Quizás descubra que eso forma parte de su pasado.



Casi de modo natural, solemos acumular cosas a las que nos acostumbramos. Algo similar pasa con las acciones que postergamos. Por eso, revisar lo que nos rodea puede ser un excelente ejercicio para mirar desde otra perspectiva –la del presente-, reclasificar y deshacernos de lo que ya perdió sentido.



Un pequeño cambio a su alrededor puede ser la llave, el gran motor para cambios más grandes. Este tipo de actitudes esconde una renovación poderosa. Usted no es el mismo de hace cinco años, ni siquiera es el mismo del año pasado… Reconocerlo le permitirá aprovechar la energía positiva del cambio.



Atrévase a cambiar lo que le disgusta. Empiece por pequeñas cosas; si no puede hacerlo solo, pida ayuda (otros no estarán tan ligados a esos objetos). Y, mientras hace esta “limpieza”, recuerde que puede ser el comienzo de una etapa de renovación… Después de todo, de usted depende cuál es el camino a seguir.







Dr. Alberto Cormillot

jueves, 29 de abril de 2010

Ponerse en movimiento

Ahora que empieza el buen tiempo, podemos aprovechar para poner el cuerpo en movimiento.
La actividad física moderada, realizada con regularidad, aporta grandes beneficios a la salud del cuerpo y la mente.

Para el cuerpo:

 Mejora el funcionamiento cardiovascular y previene enfermedades del corazón y cerebro vasculares.

 Regula la tensión sanguínea.

 Mejora el sistema respiratorio.

 Aumenta el colesterol bueno y disminuye e malo.

 Ayuda a controlar el azúcar en sangre.

 Previene la osteoporosis.

 Ayuda a eliminar calorías

 Fortalece los músculos.

 Aumenta la resistencia y la elasticidad

Para la mente:

 Produce sensación de bienestar.

 Disminuye el estrés, tensiones y ansiedad.

 Permite un sueño más tranquilo.

 Favorece el contacto social.

 Aumenta el rendimiento intelectual.

 Mejora la vida sexual y emocional.

jueves, 1 de abril de 2010

Las mejores ideas para un desayuno saludable

Hacer la primera comida del día completa y balanceada favorece la concentración, el rendimiento y el aprendizaje. Es importante en especial para los chicos, que están creciendo y formando sus hábitos alimentarios.
Durante la noche, mientras dormimos, nuestro metabolismo trabaja más lentamente. Para ponerse en marcha al comenzar el día, el cuerpo necesita acelerar su metabolismo con un "combustible" : el desayuno. Elegir cereales u otros alimentos bajos en grasas y elevados en carbohidratos, ayuda a obtener los nutrientes esenciales, promueve una sensación de saciedad y disminuye el deseo de comer a media mañana.
En cambio, saltear la primera comida del día lleva a comer alimentos grasos en las horas siguientes, a media mañana y al mediodía. Esto suele sucederles a los niños que se van de casa con el estómago vacío y paran en el kiosco a comprar golosinas o chocolates.

Variar los alimentosEl desayuno no tiene por qué consistir en comidas convencionales. Puede incluir un sandwich de miga, tostadas, frutas frescas o secas, pero es importante mantener la regularidad. Cuide que su hijo tome siempre el desayuno antes de ir a la escuela, y propóngale alternativas interesantes.

¿Apurada?Lo mejor, como siempre, es educar con el ejemplo. Será difícil que su hijo se habitúe a desayunar si ve que usted no lo hace, o sólo toma mates de pie, en medio de corridas para salir a tiempo. Por eso, genere espacio y tiempo apropiados; tal vez levantarse unos minutos antes facilita la posibilidad de desayunar con la tranquilidad necesaria. También puede dejar preparado desde la noche anterior todo lo posible para el desayuno. Si le falta tiempo, busque alternativas fáciles de preparar: un cartón individual de jugo de naranja y una banana grande o una barra de cereal, por ejemplo.

Más energíaEl rendimiento escolar y laboral mejora con un desayuno de alta energía. Durante la noche bajan los porcentajes de azúcar en sangre, y los niveles muy bajos de azúcar en sangre se asocian con dificultades para memorizar, concentrarse y aprender. Desayunar eleva los niveles de azúcar en sangre y así ayuda al cuerpo a funcionar con mayor efectividad.
Existe también un vínculo entre el cociente intelectual y la ingesta de hierro. El desayuno es una buena oportunidad para consumir alimentos con hierro, como cereales fortificados sin azúcar o panes integrales. El jugo de naranja brinda vitamina C, necesaria para la absorción del hierro que proviene de fuentes vegetales.

Tomar líquidos:Comenzar el día deshidratado lleva a dificultades de concentración, dolores de cabeza e irritabilidad. Beber agua, jugos de frutas, leche, té o café ayuda a comenzar el día con la hidratación correcta. A partir de los dos años puede introducirse leche semidescremada, en tanto que la leche totalmente descremada no debe utilizarse hasta después de los 5 años de edad.

Alternativas ricas y sanas

Té con leche, y tostadas con queso blanco o mozzarella y mermelada.


Mate cocido con leche, y pan negro con queso de máquina o port salut.

Té con leche, tostadas con poca cantidad de manteca y dulce de frutas o dulce de leche.

1 vaso de leche sola, con cacao o esencia de vainilla o canela y galletitas de agua o integrales con queso y mermelada.

1 taza de leche con copos sin azúcar o mezcla de cereales y una fruta fresca.

Yogur con frutas o cereales sin azúcar y una infusión.

Yogur bebible con vainillas.

Jugo de frutas y un tostado de jamón y queso.

Licuado de frutas con leche y un pancito con queso blanco.



fuente:www.cormillot.com.
__._,_.___

domingo, 21 de marzo de 2010

ALCO ZARAGOZA CUMPLE SU PRIMER AÑO



19 marzo 2009 --- 19 marzo 2010

Y bajamos 102 kilos y pasamos ( algunas se quedaron otras se fueron ) 28 personas, y tenemos un club del caminante ,y 2 compañeros en mantenimiento y el ultimo integrante del grupo ,bajo 5 kilos su primera semana, y cada sábado compartimos ilusiones ,pesos y nuestra semana , y nos llamamos y nos mandamos mails entre semana , y tenemos una blog y un grupo en facebook , y en un mes un espacio en un magazine de la radio,Y acá seguimos ...fuertes enteros y con ganas de seguir trabajando por y para nosotros.
Para alcanzar nuestra tan ansiada sobriedad

Gracias por estar .....

jueves, 11 de marzo de 2010

ALCO ZARAGOZA ,se complace en presentar este libro en Zaragoza, en el Ambito Cultural del Corte Ingles ,el Jueves 18 de marzo a las 19,30 hs..

Los esperamos...




LA PROTAGONISTA: BEATRIZ

Beatriz es una persona afectada por el Trastorno de la Alimentación. Este libro recoge las diferentes etapas por las que transcurre su vida:

1. Un inicio cultural: la creencia de que “los niños gordos son bonitos”.
2. Sobreexposición a un determinado estímulo: la comida.
3. Retirada de este estímulo: “estas demasiado gorda, tienes que hacer dieta”.
4. La entrada al mundo de las dietas. Acostumbrar al exceso para después pasar a la restricción.
5. Las constantes recaídas que agravan implacablemente el problema.
6. El tratamiento multidisciplinar como el más indicado.

A lo largo del libro aparecen otros casos y ejemplos de personas afectadas por problemas similares. Otros orígenes que también causan la enfermedad, como el shock post-traumático. Se comentan extensamente los episodios de recaídas, muy frecuentes en la obesidad.

Las explicaciones y comentarios técnicos se encuentran en paralelo a la narración, mediante tablas, ilustraciones y esquemas. En la última parte figuran tablas de diagnóstico y las preguntas más frecuentes asociadas a la obesidad.

miércoles, 10 de febrero de 2010

Visita ,caminata y reunion

Este sabado estamos de parabienes..retomamos las caminatas y nos visita el DR Jordi Carballido, especialista en obesidad, escritor ( aca pueden ver su blog)

Nos va a acompañar en las caminatas y despues se une a nuestra reunion para compartirla con nosotros.
Esta vez la visita va a ser informal,porque por falta de tiempo no pudimos oganizar algo mejor.Pero promete volver para la presentacion de su libro en Zaragoza.

Asi que te esperamos el sabado13 a las 10 hs ,en Don Jaime y Echegaray Caballero y a las 12 hs en el lugar de reunion de siempre.

No nos falles que tu concurrencia es importante..
Cualquier duda ponete en contacto conmigo al 670528799

CARINA D'AMICO
Coordinadora ALCO ZARAGOZA

martes, 2 de febrero de 2010

LA CONSTANCIA

La constancia en la acción, es uno de los elementos fundamentales para conseguir el éxito. No sólo te permite conseguir tus objetivos, sino que además hace que el esfuerzo sea pequeño. Si haces un pequeño esfuerzo todos los días, tiene más eficacia, que un gran esfuerzo una sola vez.

Hay gente también que se queda paralizada por el miedo al fracaso, el quedarte paralizada te garantiza ese fracaso que tanto temes. Si entras en acción puede que las cosas no te salgan bien, pero en el peor de los casos saldrán mejor que quedándote paralizada.

claves para la acción,
No te pongas un plan muy difícil de llevar

Más vale muy poco todos los días, que mucho esfuerzo tres días y luego se acabó.

Establecer planes de acción realistas
Por supuesto intenta siempre hacer un poco más, pero no te exijas demasiado porque es preferible que hagas poco constantemente, que hagas mucho durante unos días y después todo quede en nada.


Ser firme pero no inflexible

Tener claro lo que queremos hacer y hacerlo.

Ya sabes, como el timón de un barco, un pequeño ajuste al principio del viaje, cambia el rumbo de manera radical. Y cuanto más lejano es nuestro objetivo, ese pequeño movimiento de timón, produce un mayor cambio en el destino final.


Cuando un día cae nuestro plan, no desanimarnos y seguir

Ocurre a menudo que cuando llevamos un plan, y fallamos un día en nuestro plan o decaemos, lo echamos todo a perder ¿por qué?.

has caído un día, no importa, levántate y continúa.

Esto pasa especialmente con las dietas para adelgazar, un día caemos y rompemos la dieta

la clave está en continuar a pesar de las caídas.

jueves, 28 de enero de 2010

Dime cómo comes y te diré por qué no bajas

Más que la dieta o la voluntad que ponemos, son los hábitos de todos los días los que determinan la suerte de nuestro peso. Abandone los comportamientos automatizados: haga conciente y mejore su relación con la comida.

La manera en que comemos es tan importante como la cantidad y la calidad de los alimentos elegidos. Mientras la mayoría de las personas se preocupa sólo por cuántas calorías tiene una comida, algunos de los hábitos que hemos adquirido a lo largo de nuestra vida conspiran contra nuestros mejores esfuerzos para adelgazar.

Una de las razones por las cuales se come de más es porque la mayoría de las veces no nos damos cuenta de que estamos comiendo. Suele ocurrir que mientras estamos pensando en otra cosa o mirando la televisión agregamos calorías que no necesitamos.

Sin que le prestemos demasiada atención, nuestro cuerpo se acostumbra a todo lo que rodea el momento de comer. La hora en que comemos, lo que estamos haciendo durante la comida, lo que vemos, lo que escuchamos, cómo nos sentamos y muchas otras conductas "invisibles" se unen para dar forma a esta verdadera ceremonia. Muchos de estos elementos actúan como estímulos que afectan la cantidad que comemos o los alimentos que elegimos. De la misma manera, si durante el día nos topamos con un paquete de galletitas abierto, lo más probable es que tomemos unas cuantas aun cuando no se nos pasara por la cabeza cinco minutos antes.


Apague el televisor a la hora de la cena: cuando comemos sin pensar en la comida, comemos de más.



El plato sin fondo
Esto quedó demostrado con un curioso experimento que se realizó en Estados Unidos. Los investigadores hicieron que 44 personas tomaran sopa que se les servía en un bol. Sin que lo supieran, sin embargo, algunos de los platos estaban conectados por debajo de la mesa a un tubo por el cual se los volvía a llenar a medida que los pacientes comían. Esto significaba que literalmente, el plato no se vaciaba nunca.

Gracias a esto, los científicos descubrieron que las personas con los platos que volvían a llenarse sin que se dieran cuenta consumieron un 70% más de sopa que quienes tomaban en un plato normal. De acuerdo a las conclusiones del estudio, como no podían ver que el plato se vaciara, no sentían saciedad a pesar de que comían más que de costumbre.

Volver a empezar
La propuesta parece sencilla. Si nos tientan unos alfajores que encontramos "por casualidad" al abrir la alacena, ¿por qué no guardarlos en el fondo, atrás del tarro de harina y de la yerba, para que no "aparezcan" de golpe y arruinen nuestra dieta? Si cuando miramos televisión "tenemos" que tomar más cerveza, ¿por qué no apagar el aparato hasta terminar de comer?

Es cierto que los comportamientos que repetimos durante mucho tiempo terminan por "automatizarse" y son difíciles de cambiar. Pero tal como aprendimos a comer apurados o a vaciar el plato sin tener hambre, podemos aprender a corregir esas conductas y adoptar otras nuevas y más saludables. Sólo necesita ganas de intentarlo y mucha práctica. La recompensa bien vale el esfuerzo.

Para cambiar nuestra forma de comer existen distintas técnicas, algunas muy sencillas, que debemos incluir de a poco en nuestra rutina.

No se puede cambiar en dos días costumbres que hemos aprendido y practicado a lo largo de muchos años. Introduzca cambios poco a poco.



¿Qué hábitos conviene comenzar a cambiar?
* Comer rápido, al paso o masticando poco.
* Comer sin disfrutar la comida.
* Comer "automáticamente" (por ejemplo, mientras miramos televisión).
* Comer porciones muy abundantes.
* Comer hasta "limpiar" el plato.
* Comer todo el paquete o la lata de galletitas.
* Comer una porción....y otra....y otra...
* Hablar de comida todo el día.
* Hacer sobremesa sin retirar platos y fuentes.
* Comprar comida o cocinar justo en el momento en que se está "muriendo de hambre".
* Dejar o guardar alimentos tentadores a la vista.

No se permita excusas como "soy demasiado ansioso", "no tengo tiempo para sentarme a comer" o "no me gusta dejar comida en el plato". No son reales: empiece a cambiar hoy.



¿Qué hábitos conviene incorporar?
* Coma siempre sentado. Aunque no sea más que una colación liviana, evite comerla mientras camina por la calle, o parado, o mientras hace otra cosa.

* Siéntese cómodo pero erguido. No asuma una "posición de ataque" frente a la comida.

* Disfrute de cada bocado, mastique bien la comida, espere un momento entre bocado y bocado.

* Propóngase masticar al menos diez veces la comida sólida. Espere a tragar un bocado antes de servirse otro.

* Apoye los cubiertos sobre la mesa entre un bocado y otro. De esta manera hará una pausa, comerá más despacio y tomará más conciencia de estar comiendo.

* Use plato y cubiertos de postre. Lo ayudará a controlar las cantidades de comida.

* No lleve fuentes a la mesa o retírelas después de servir los platos. Tener comida a la vista puede tentarlo aunque no sienta apetito.

* Sírvase sólo una vez.

* Coma sólo de su plato. No "pique" del plato de otro, ni termine lo que otro no comió.

* Coma un caramelo 10 a 15 minutos antes de las comidas principales. Contribuirá a que sienta menos apetito.

* Comience las comidas con caldo, sopa o ensalada. Ayudan a conseguir saciedad.

* Beba mucho líquido: agua, soda, gaseosas o jugos dietéticos.

* Controle el consumo de alcohol.

* Cuando coma, dedíquese sólo a comer. Evite hacer otras actividades como mirar televisión, discutir, leer, atender el teléfono, ordenar papeles.

* Disponga la mesa en forma agradable, con mantel, flores u otros detalles que resulten atractivos.



No confíe sólo en "poner voluntad". Lo que se necesita para adelgazar y mantenerse es mucha práctica.


No intente incorporar todas las nuevas técnicas a la vez. Para comenzar, implemente aquellos recursos que considere más fáciles de aplicar en su situación, y luego vaya agregando los demás. Amplíe la lista de recursos si usted encuentra otros que le dan buen resultado.

Fuente: www.drcormillot. com

lunes, 25 de enero de 2010

6 claves para cultivar la autoestima

1.

Acéptese. Reconocer honestamente lo que uno es resulta indispensable para desarrollar virtudes y cambiar lo que sea posible y necesario.
2.

Confíe en usted. Deposite confianza en su juicio, opinión, sentimientos, y en su capacidad para vivir y ser feliz. Usted es responsable de sus actos y decisiones: usted elige cómo vivir.
3.

Fíjese expectativas realistas y a corto plazo. Los sueños son como huertas: cuanto más energía se deposita en ellas, más frutos darán. Para ellos, los objetivos deben ser apropiados y realistas. Visualice cómo puede alcanzarlos; desarrolle nuevas destrezas y conocimientos si fuese necesario.
4.

Arriesgue. Despliegue su coraje para explorar nuevos pensamientos, conductas y posibilidades. A veces, correr riesgos apropiados es positivo para crecer. Sepa que todo cambio atemoriza, aunque sea deseado: a menudo nos sentimos más cómodos con un problema conocido que con dar algún paso en una dirección desconocida, más allá de que ésta pueda conducir a la solución.
5.

Adopte una actitud positiva. Siéntase orgulloso de lo que usted es y de lo que hace, y no permita que otros interfieran negativamente con usted. Usted no puede cambiar la conducta de los demás pero sí la propia. Entonces, obre bien, acepte sus destrezas y conocimientos, use sus talentos para desarrollarlos al máximo, dígase frases como "puedo logralo", "soy capaz de hacerlo", "soy inteligente" , etc.
6.

Ocúpese más de evaluarse a usted mismo que a los demás. ¿Suele invertir demasiada energía y tiempo en criticar, envidiar o juzgar cómo hacen los otros sus vidas? Será más estimulante y fructífero dedicarse más a observar su interior, a descubrir qué desea, qué puede modificar y a trabajar en pos de ello.


DR CORMILLOT

domingo, 3 de enero de 2010

ALCO ZARAGOZA 2009...70 KILOS MENOS...

ESTOS SON NUESTRO LOGROS DEL 2009 ,QUEREMOS COMPARTIRLOS CON USTEDES Y CONTARLES QUE SEGUIMOS TRABAJANDO PARA HACER DE ESTE GRUPO CADA DIA UN POCO MEJOR...


CLENIA ,BAJO 15 KILOS EN 10 MESES...ESTA A 3 DE SU PESO DESEADO

PANCHO. BAJO 30 KILOS EN 5 MESES ,ESTA EN MANTENIMIENTO HACE 4.

CARINA ,BAJO 26 KILOS EN 10 MESES ,LE QUEDAN 35 AUN .



GRACIAS A TODOS POR EL APOYO Y LOS ESPERAMOS ....

viernes, 1 de enero de 2010

EL ELEFANTE ENCADENADO

Nuestro deseo para este año es que rompas tu cadena y creas en vos!!!!

FELIZ AÑO 2010!!!!!!!!


Cuando yo era pequeño me encantaban los circos,y lo que más me gustaba de ellos eran los animales.Me llamaba especialmente la atención el elefante que,como más tarde supe era también el animal preferido de otros niños.Durente la función,la enorme bestía hacía gala de un tamaño,un peso y una fuerza descomunales...Pero despuésde la actuación y hasta poco antes de volver al escenario,el elefante siempre permanecía atado a una pequeña estaca clavada en el suelo con una cadena que aprisionaba sus patas.

Sin embargo,la estaca era sólo un minúsculo pedazo de madera apenas enterrado unos centímetros en el suelo.Y aunque la madera era gruesa y poderosa,me parecía obvio que un animal capaz de arrancar un árbol de cuajo con su fuerza,podría liberarse con facilidad de la estaca y huir.

El misterio sigue pareciéndome evidente.
¿Qué lo sujetaentonces?.
¿Por qué no huye?.
Cuando era niño,yo todavía confiaba en la sabiduría de los mayores.Pregunté entonces por el misterio del elefante...Alguno de ellos me explicó que el elefante no huía porque estaba amaestrado.

Hice entonces la pregunta obvia:"Si está amaestrado,¿por qué lo encadenan?".
No recuerdo haber recibido ninguna respuesta coherente.
Con el tiempo,me olvidé del misterio del elefante y la estaca...
Hace algunos años,descubrí que,por suerte para mí,alguien había sido lo suficientemente sabio como para encontrar la respuesta:

"El elefante del circo no escapa porque ha estado atado a una estaca parecida desde que era muy,muy pequeño".

Cerré los ojos e imaginé al indefenso elefante recién nacido sujeto a la estaca.Estoy seguro de que,en aquel momento el elefantito empujó,tiró y sudó tratando de soltarse.Y,a pesar de sus esfuerzos,no lo consiguió,porque aquella estaca era demasiado dura para él.
Imaginé que se dormía agotado y al día siguiente lo volvía a intentar,y al otro día y al otro...Hasta que,un día,un día terrible para su historia,el animal aceptó su impotencia y se resignó a su destino.

Ese elefante enorme y poderoso que vemos en el circo no escapa,porque,pobre,cree que no puede.

Tiene grabado el recuerdo de la impotencia que sintió poco después de nacer.
Y lo peor es que jamás se ha vuelto a cuestionar seriamente ese recuerdo.
Jamás,jamás intentó volver a poner a prueba su fuerza.

Todos somos un poco como el elefante del circo:vamos por el mundo atados a cientos de estacas que nos restan libertad.

Vivimos pensando que "no podemos" hacer montones de cosas,simplemente porque una vez,hace tiempo lo intentamos y no lo conseguimos.
Hicimos entonces lo mismo que el elefante,y grabamos en nuestra memoria este mensaje:No puedo,no puedo y nunca podré.

Hemos crecido llevando este mensaje que nos impusimos a nosotros mismos y por eso nunca más volvimos a intentar liberarnos de la estaca.

Cuando,a veces,sentimos los grilletes y hacemos sonar las cadenas,miramos de reojo la estaca y pensamos:"No puedo y nunca podré".

Ésto es lo que te pasa,vives condicionado por el recuerdo de una persona que ya no existe en tí,que no pudo.

Tu única manera de saber si puedes es intentarlo de nuevo poniendo en ello todo tu corazón...¡¡¡Todo tu corazón!!!.


JORGE BUCAY.